El
alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, ha reconocido este jueves que ha sido "un
honor" participar en la
procesión extraordinaria "por el 775 aniversario de la conquista de Sevilla por las tropas del rey San Fernando", motivo este por el que e
l tradicional cortejo que tiene lugar cada 23 de noviembre se ha celebrado no solo en el
interior de la Catedral sino que ha discurrido también
junto a las gradas altas.
"Este día se conmemora un acontecimiento que fue fundamental para
entender la historia de nuestra ciudad. Para mí ha sido un
orgullo portar la espada Lobera del rey santo. Con esta gesta, Fernando III dio comienzo a un nuevo periodo que llega hasta nuestros días", ha señalado en un audio remitido a los medios.
La Catedral de Sevilla ha acogido la celebración de la
doble festividad de San Clemente y la reconquista de la ciudad por San Fernando con la tradicional
procesión de la
reliquia de San Clemente y la espada del Santo Rey, que tradicionalmente porta el alcalde de la ciudad,
blandida en forma de cruz, mientras que el
concejal más joven de la Corporación,
Blanca Gastalver, ha llevado el
Pendón de San Fernando. Este año, además, coincide con el
775 aniversario de la restitución del culto cristiano.
Se ha conmemora así de forma especial esta fecha con una serie de
actos extraordinarios. Por un lado, la
urna de San Fernando ha estado
abierta a la veneración de los fieles y devotos en horario de 8,30 a 10,30 horas, y se ha celebrado una
eucaristía que ha estado presidida por el deán-presidente, Francisco José Ortiz.
El
cortejo, del que también han formado parte las
Tablas Alfonsíes y la Virgen de las Batallas, en andas en ambos casos, ha tenido el siguiente recorrido: salida, Puerta de San Fernando (Parroquia del Sagrario), Gradas altas, Avenida de la Constitución, Alemanes, Cardenal Carlos Amigo Vallejo, Plaza Virgen de los Reyes, y entrada por la Puerta de los Palos.
Precisamente, la
parroquia del Sagrario ha sido
una de las novedades de la procesión de este año, ya que ha transitado también por el interior del templo anexo a la Seo hispalense una vez culminados los
trabajos de rehabilitación, que han durado cuatro años, si bien hasta el día 1 de diciembre no recuperará el culto.