Los trabajadores del Personal técnico de integración social (PTIS) de las empresas concesionarias de estos servicios educativos en Andalucía que están acampados desde el pasado lunes ante la Delegación Territorial de Desarrollo Educativo en Sevilla han señalado que "llegarán hasta el final" porque "han sido muchos los desatinos que se han hecho por parte de las empresas".
Con esta acciones, CGT reclama "dignidad profesional y respeto" de la Administración andaluza, tanto para las personas profesionales PTIS como para el alumnado con necesidades especiales que se encuentra igualmente "maltratado por la Junta de Andalucía al escatimar los recursos que necesitan y precarizar a las profesionales de la integración".
Así, y en declaraciones a Europa Press, la portavoz de CGT Carmen Rodríguez ha justificado esta acampada, que se mantendrá hasta este jueves 30 de noviembre cuando desde este lugar parta una manifestación hasta el Parlamento de Andalucía, porque "el servicio se ha tornado insostenible".
"Desde hace ya más de diez años llevamos una lucha muy potente porque han sido muchos los desatinos que se han hecho por parte de las empresas y estamos dispuestos a llegar hasta el final", ha manifestado Rodríguez, quien junto a sus compañeros están en huelga desde el pasado 21 de noviembre.
Asimismo, ha apuntado que desde CGT irán pensando las acciones sindicales "en función de las necesidades o de la presión que se está ejerciendo en la Consejería". "Todo depende de ellos", ha sentenciado Rodríguez, quien ha señalado que en esta situación "puede haber gente que lleve casi 20 años".
"Yo en mi caso llevo diez años en el servicio y en estos diez años hemos tenido incluso empresas que han estado seis meses sin pagarnos", momento en que "empezó a judicializarse esta historia", ha manifestado Rodríguez, quien ha añadido que la protesta actual "es otra vuelta de tuerca" porque otra empresa "empieza a saltarse todo lo que está relacionado con el convenio que ahora mismo nos acoge, que no quiere decir que sea el que nos corresponde".
Ha explicado que la Consejería, a través de la Agencia Pública Andaluza de Educación (APAE), "realiza lotes de los trabajadores y salimos como una especie de subasta, en la que se puja por menos dinero", lo que luego "se traduce en nuestros salarios, puesto que el rendimiento y los beneficios que quiere sacar la empresa son cada vez mayores", produciéndose así "todos los impagos y cambios de contratos".
Con lo cual, continúa, "siempre estamos con el tema judicial y con el tema de inspección de trabajo. Es como un cuento de nunca acabar, por eso lo que queremos es la subrogación" por parte de la Junta, ha manifestado la representante sindical, quien ha asegurado que la situación que están viviendo "afecta muchísimo a los niños" que ellas atienden y que "están sufriendo estos paros y nuestra precariedad".
En este sentido, ha explicado que la Junta "está trasladando al personal laboral a los centros que hay menos carga y a nosotros nos está destinando a los centros donde hay más, que son actualmente los colegios, ya que en los centros de secundaria la cosa suele estar más aliviada porque los niños ya están derivados a otros centros más especializados".