El
vicesecretario de Política Autonómica y Municipal y Análisis Electoral del
PP, Elías Bendodo, ha asegurado este viernes que
“ni he podido volver ni volvería” a la política andaluza, porque
“hay que saber irse” y ha asegurado sentirse
reforzado con su nuevo cargo en la dirección nacional del partido, ya que aglutinará las competencias que antes tenía en
una secretaría general que “no tenía sentido” sin un Gobierno del PP.
Así se ha pronunciado Bendodo durante su participación, en Sevilla,
en los encuentros informativos de Europa Press Andalucía en colaboración con la Fundación Cajasol. Junto a él, también ha participado el
presidente del Consejo Económico y Social (CES) de Andalucía y exvicepresidente de la Junta, Juan Marín.
Bendodo ha reconocido que
“se ha escrito mucho” sobre los cambios en el organigrama de su partido tras la investidura de Pedro Sánchez y ha asegurado que “
ni he pedido volver ni volvería” y ha
parafraseado a Joaquín Sabina: “donde se ha sido feliz, mejor no hay que volver”.
Ha reconocido que
fueron “los mejores años de mi vida política” y que lo dejó “
con una mayoría absoluta” pero en política "saber irse es lo más difícil" y tras cuatro años en el “Gobierno del cambio", es una etapa pasada "porque
al final no son las mismas circunstancias ni las mismas personas".
Sobre el
nuevo organigrama del PP, ha apuntado que al no haber un Gobierno del PP en España
"no tiene sentido" la figura del secretario general que ostentaba y se ha mostrado
"contento y satisfecho" con su nueva responsabilidad, que aglutinará las competencias que ya tenía.
Esta vez
parafraseando a Curro Romero, que cumple 90 años, ha asegurado que "las cornadas que no son mortales te fortalecen", reiterando que sale “
reforzado” y que tiene “l
a confianza del presidente”.
El “disparate” del verificador
También en el ámbito nacional, Bendodo consideró un
"disparate" que el presidente del Gobierno acepte contar con la figura de un "
verificador" internacional para garantizar el cumplimiento del
acuerdo entre PSOE y Junts cuando "
en una democracia, el verificador de lo que hace el Gobierno es el pueblo".
Para Bendodo, Pedro
Sánchez "ha perdido una de las potestades que tiene el presidente del Gobierno", como es la de
convocar elecciones, advirtiendo que "no van a ser cuando diga" él sino su “
vicepresidente ejecutivo del Gobierno, que gobierna desde Waterloo", en referencia a Carles Puigdemont, apuntando que
ya ha avisado a su partido de que "
esta legislatura durará lo que dure la palabra de Sánchez" y "estaremos en campaña en un cuarto de hora", porque la palabra del presidente del Gobierno "
no vale nada".
Además, ha
respaldado que la Junta de Andalucía pueda reclamar al Estado el
traspaso de las competencias en trenes de cercanías que discurren por la comunidad, al igual que los Rodalíes catalanes, aunque ha puntualizado que
"previo pago" de "6.000 millones de euros", que es "lo que cuesta mantener esa red".
También considera “
un acierto que Andalucía salga a la calle” este domingo al ser un “
llamamiento de la sociedad civil, no de ningún partido político" y tan cerca del 4 de diciembre, y que "todos los andaluces sintamos la bandera como propia porque no es patrimonio de nadie", insistiendo en que la región “
no va a permitir tratos de favor a ningún territorio por encima de Andalucía".
Juan Marín no irá aunque la comparte
Por su parte,
Marín reconoció que él
no va a “ninguna” manifestación porque
“me siento en los despachos a resolver los problemas, soy de otra forma de pensar, no voy detrás de las pancartas”, pero sí que apuntó que
comparte la movilización y "todas las que se produzcan para que realmente
Andalucía esté exactamente igual que el resto de las comunidades autónomas de este país".
Para el exvicepresidente andaluz, a
Andalucía se le debe dar "lo que le corresponde, ni más ni menos", apuntando que "
la desigualdad ha existido siempre" e incluso está en la
Constitución, señalando directamente los
cupos vasco y navarro, con los que
siempre ha estado en desacuerdo.