El Sevilla vive una situación complicada y el puesto de Diego Alonso comienza a estar en el aire. Desde el club lo han ratificado cada vez que alguien ha hablado en los medios de comunicación, pero el fútbol es resultado y este técnico no gana. Según ha podido saber este periódico, el entrenador chileno tendrá los tres partidos que quedan de año para intentar darle la vuelta a la situación.
El conjunto nervionense tiene por delante tres partidos antes de que acabe el 2023 ante Getafe, Granada y Atlético de Madrid en ese orden, si el técnico no saca resultados positivos, se le buscará un relevo en el mercado de fichajes de enero.
La dirección deportiva lo mantiene en el cargo porque está viendo mejoría en los últimos partidos, porque el técnico cuenta con el apoyo de los pesos pesados de la plantilla y porque no hay nadie en el mercado que convenza.
En la previa del encuentro contra el Lens, Víctor Orta ya habló de que los malos resultados podrían acabar con la continuidad del técnico: “No voy a inventar yo algo que lleva en la Biblia del fútbol tanto tiempo. A veces pasa. Quien se carga a los entrenadores y también a los directores deportivos a medio plazo son los resultados, y cuando llevas tanto tiempo en esta profesión, no puedes querer sólo lo bonito”.
Tres oportunidades tiene Diego Alonso para enderezar el rumbo del Sevilla y poder mantenerse en el puesto. Está contando con más confianza que nadie, ahora tiene que devolverla con resultados para no ser despedido.