La
diabetes tipo 1 es la
enfermedad crónica metabólica más frecuente en la infancia y, por ahora, incurable. En el caso de los menores, el
tratamiento pediátrico no solo busca dar solución a las
consecuencias directas de esta patología, sino que resalta la importancia de
educar y aumentar la calidad de vida de los pacientes que conviven con ella. Para mejorar su día a día, el
equipo pediátrico de Vithas Sevilla, conformado por los especialistas del
Grupo Instituto Hispalense de Pediatría (IHP), ha coordinado la
implantación de dos microinfusoras de insulina a dos menores, de 9 y 12 años.
También conocidas como
“bombas de insulina”, la tecnología aplicada al tratamiento de la diabetes tipo 1 permite el
seguimiento continuo de los niveles de glucemia, así como la administración de la insulina en función de estos, de una manera parecida a
como lo haría un páncreas sano.
Para su puesta en marcha, tal y como expone el
Dr. Eugenio Fernández, pediatra especialista en endocrinología de Grupo IHP en Vithas Sevilla, “la colocación de las dos microinfusoras se ha realizado de una forma que conocemos como sistema integrado. Este formato integra un sensor de glucosa intersticial que se comunica con la microinfusora de manera que se puede
dosificar de manera precisa con las necesidades de insulina del paciente en cada momento, ya estén en reposo, haciendo ejercicio o vayan a comer”. El dispositivo permite de esta manera una
mayor autonomía de los menores, quienes reciben la dosis de insulina
según las necesidades de su organismo, de forma automática y controlada por sensores continuos de glucosa digitales.
Hacer deporte, comer o simplemente
seguir una vida acorde a su edad será más fácil para Paco y Nuria, quienes conviven con la diabetes tipo 1 desde que tienen uso de razón. Tal y como señalan sus padres “este
tratamiento a través del dispositivo les da mucha
más independencia y mejora su calidad de vida. No es fácil cuidar de un pequeño con diabetes, porque duele mucho verlos con toda la medicación. Con el nuevo dispositivo se reducen los pinchazos y para ellos es todo más normal”. Una postura a la que suman que “
ya no tienen que estar pinchándose tantísimas veces, además de estar más controlado y poder ver el nivel de glucemia que tienen, ya que el dispositivo te va alertando si sucede algo”.
De este modo, para afrontar este cambio en la forma de administrar la insulina los menores junto a sus padres sólo han tenido que hacer un
cursillo de dos sesiones en el propio Hospital Vithas Sevilla. La
simplicidad de los dispositivos permite el uso por los propios pacientes bajo la supervisión de sus padres.
Así, “las microinfusoras añaden
muchas más mejoras en el tratamiento de la diabetes tipo 1 y para su uso solo hace falta una primera sesión en la cual se explica el funcionamiento del dispositivo y se les pone en modo prueba sin insulina para que vayan viendo cómo funciona el sensor y cómo se comunica y, a partir de la segunda sesión se les pone la microinfusora con insulina, en principio en un modo manual, para que ellos puedan ajustar la dosis y a partir del tercer y cuarto día ya se pasa al modo automático”, ha destacado el Dr. Fernández.
Ventajas para pacientes y especialistas
Tal y como señalan desde el equipo de pediatría de Vithas Sevilla, entre las principales
ventajas de las microinfusoras de insulina se encuentra que el
aporte continuo de insulina por parte de la bomba permite
prescindir del uso de insulinas de acción prolongada y ofrece la posibilidad de administrar la insulina d
e una forma más fisiológica y adaptable al ritmo de vida de los pacientes.
“Retrasar una comida o cambiar planes es posible porque el sensor se comunica directamente con la bomba y en el caso de necesitar insulina esta se administra directamente y ‘en
microdosis’, sin necesidad de administrar la dosis completa de una vez, como ocurre con la pauta habitual con plumas de insulina en inyecciones programadas”, destaca el especialista en endocrinología pediátrica.
Así, el
seguimiento del control metabólico de estos pacientes se realiza
de forma remota a través de una aplicación que permite a los padres y a los profesionales
acceder a los datos de forma ágil y precisa.