Este sábado se repiten los paros parciales convocados en el servicio municipal de grúa de Sevilla, gestionado por una unión temporal de empresas (UTE) conformada por Talleres y Automóviles Diego y Tranfocar; cuyo comité de huelga ha urgido al Ayuntamiento hispalense para que formalice la nueva licitación del servicio antes de que concluya el año de vigencia del actual contrato, al objeto de impedir una prórroga automática de un año del mismo en favor de la actual UTE, a cuenta del conflicto desencadenado.
Santiago López, responsable del Sindicato Profesional de Policías Municipales de España en este servicio municipal externalizado, ha explicado que el día 31 de enero del nuevo año que está a punto de comenzar expira el año de vigencia del contrato adjudicado a la citada UTE para gestionar la grúa municipal.
En ese sentido, ha manifestado que su organización sindical, que encabeza el comité de huelga, ha celebrado este pasado viernes una reunión con el concejal de Seguridad Ciudadana, Movilidad y Recursos Humanos, el popular Ignacio Flores, en demanda de que el Ayuntamiento formalice la nueva licitación del contrato de gestión del servicio antes de dicha fecha, al objeto de impedir que la UTE goce una prórroga automática de otro año más en caso de no pesar una nueva licitación al vencer su año de contrato.
Del mismo modo, ha explicado que la plantilla se ha declarado "insumisa" ante un "nuevo cuadrante, fuera de plazo", planteado por la dirección de la UTE con una serie de "horas extraordinarias", lo que constituiría a su juicio "una vulneración encubierta" de la convocatoria de paros parciales. La UTE, a su entender, intentaría "esquivar" los paros parciales durante la Cabalgata de Reyes Magos del día 5 y las cabalgatas de los distritos del día siguiente, que merced a los servicios mínimos de la huelga contaría con sólo "tres grúas" frente a las nueve pretendidas por la empresa.
De este modo, la convocatoria de paros parciales de dos horas tres veces por día sigue adelante para las jornadas del 2, 4, 5, 6 y 7 de enero, además de este sábado.
En su escrito de preaviso de huelga, los representantes sindicales de la plantilla señalan que la entidad gestora de este servicio público no estaría cumpliendo el acuerdo alcanzado el pasado mes de abril en el seno del Sercla, para poner fin al conflicto laboral que atravesaba ya entonces el servicio, huelga incluida.
Para la convocatoria de huelga promovida entonces, el sindicato avisaba de que la unión temporal de empresas (UTE) Grúa Sevilla, como entonces nueva adjudicataria de este servicio municipal y encabezada entonces por el Grupo SSG, no había "subrogado las condiciones laborales de los trabajadores de la anterior empresa concesionaria del servicio, limitándose a darles de alta en la seguridad social acogiéndolos a un convenio colectivo diferente (convenio colectivo andaluz de grúas móviles autopropulsadas) y no al convenio colectivo de retirada e inmovilización de vehículos, depósito y gestión de cobros de la grúa municipal de Sevilla (...), con la evidente pérdida de derechos tanto económicos como sociales que todo ello conlleva".
El acuerdo alcanzado el pasado mes de abril para levantar la convocatoria de huelga implicaba la aplicación del convenio colectivo de empresa del que ya disfrutaba esta plantilla antes de la nueva adjudicación del servicio, pero de manera "transitoria" hasta que pese una resolución judicial que resuelva qué convenio corresponde aplicar, si el convenio propio esgrimido por los trabajadores o el de ámbito autonómico que defiende la empresa.
La empresa, según el acuerdo, aplicaría esta primera medida en materia de nóminas, incluso de manera retroactiva, con el compromiso de no incorporar a nuevo personal durante este periodo transitorio, a menos que la plantilla actual no pueda afrontar las contingencias del contrato.
Pero desde entonces, según el comité de huelga, encabezado por el Sppme, la entidad estaría "faltando de forma recurrente a su compromiso , incurriendo en numerosos, variados y continuos incumplimientos", como el correspondiente a la aplicación transitoria
del convenio colectivo "hasta que hubiese resolución judicial que delimite cuál es el convenio aplicable", extremo que según la plantilla aún no ha sucedido.
También avisa del supuesto incumplimiento de los acuerdos correspondientes a los contratos de relevo, al imponer a los trabajadores "cláusulas abusivas de movilidad geográfica"; criticando en paralelo la instalación de "sistemas de videograbación" en el centro de trabajo, con "pretensión" de hacerlo además en los vehículos grúa, con una "más que probable vulneración del derecho al honor, a la intimidad personal y a la propia imagen" de los trabajadores.