Escasas dotaciones presupuestarias para los
barrios más pobres,
baja ejecución presupuestaria,
ausencia de partidas para políticas de
igualdad o memoria histórica y un
elevado tiempo de pago a proveedores, que supera los tres meses en el ICAS y el IMD, son algunas de las
alertas que lanza el Consejo Económico y Social (CES) de Sevilla sobre los primeros presupuestos del Gobierno de José Luis Sanz.
El
CESS ha emitido su
dictamen positivo al documento remitido por Sanz pero
reclamando que se tengan en cuenta sus consideraciones, al considerar que los presupuestos deben dirigirse a la reactivación económica y a la dotación de “infraestructuras y servicios públicos municipales precisos para atender las necesidades de la ciudadanía y la creación de empleo”, además de considerar “importante” la
aprobación de presupuestos para
no perder inversiones, convenios nominativos y “fundamentalmente no se pongan en peligro los Fondos Europeos”.
Se detiene el CESS de forma especial en la “necesidad de abordar adecuadamente el problema de las
desigualdades sociales y necesidades estructurales”, y llama la atención sobre las “
dotaciones escasas para Tres barrios-Amate, Su Eminencia, Polígonos Norte y Sur y Palmete”, los barrios más pobres de la capital, “así como el
poco nivel de ejecución de los presupuestos”.
De hecho, para el secretario general de U
GT Sevilla, Juan Bautista Ginés, "resulta
curioso que entre las medidas estratégicas se hable como ejes de la preocupación los barrios pobres, con unas dotaciones
presupuestarias bajas y unas políticas aun indefinidas", y recuerda que las partidas europeas que terminaron el
31 de diciembre sólo se habían ejecutado al 63,83%. Por su parte, el secretario de Política Institucional de
CCOO de Sevilla, Jorge Lebrón, asegura que su sindicato
no va a "cejar en su empeño de exigir medidas concretas para combatir la desigualdad arraigada en algunos barrios de la ciudad, máxime en un contexto de inflación que está haciendo más difícil la vida de muchos sevillanos y sevillanas".
La
ejecución presupuestaria ha sido una de la crítica más intensa que realiza el CESS, que cifra en casi
455 millones los fondos no ejecutados a lo largo de los
últimos cinco años, un “fenómeno estructural” que también critican los sindicatos. Así, el dictamen ve
“preocupante” tanto el nivel de ejecución de las inversiones reales como de las transferencias de capital, que han ido descendiendo en los últimos años, con lo que se han dejado de invertir en estos conceptos 148,08 millones, “con las graves repercusiones que la falta de inversión tiene en la economía, en el empleo y en la calidad de los servicios públicos municipales de la ciudad y la prestación que se realiza a la ciudadanía”, apuntan.
En el ámbito de
ingresos, también alertan de un “empeoramiento” de la ejecución, que se sitúan en los niveles de 2020 e
insiste en “mejorar el nivel de recaudación”, especialmente ante el incremento de la morosidad, algo a lo que “
no ayudará la supresión de la bonificación por domiciliación bancaria”, apuntan, añadiendo que Intervención admite que continúa existiendo un “elevado pendiente de cobro de ejercicios cerrados aumentando la antigüedad”, ante lo que hay que tomar las medidas adecuadas oportunas.
También alertan de los
niveles elevados del periodo medio de pago, situado en octubre de 2022 en 44,44 días, lejos de los 30 días del plazo legal, destacando especialmente por superar los tres meses la espera en el pago del
ICAS (99,17 días) y del IMD (90) y más de dos meses en la
Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente (64,26). “Los pagos liquidados fueron de 814,62 millones de euros, quedando pendientes de pago 32,97 millones”, avisa.
De la
Gerencia de Urbanismo también señalan que, a pesar de que se considera “una herramienta de creación de empleo y dinamizadora de la economía”, para
inversiones en ejecución de Sistemas Generales según el PGOU,
“tan solo se destinan 700.000 euros y que, además, no se destinan a nuevas actuaciones que podrían paliar las carencias y déficit de infraestructuras, sino que es
parte de una deuda contraída con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir”.
Ni igualdad ni memoria histórica
“Se echan en falta partidas presupuestarias incluidas en ejercicios anteriores como las relativas a Memoria Histórica que ha desaparecido de este presupuesto o los incrementos que este CESS viene reclamando en políticas de género y de inversión en Polígonos Industriales”, señalan contundente el dictamen. Al respecto, CCOO ha considerado que la ausencia de partidas para Memoria Democrática es una situación "inaceptable que el Gobierno municipal debe rectificar de inmediato", mientras que para UGT resulta "preocupante.
Por otro lado, el CESS cuestiona que las
últimas modificaciones tarifarias de Tussam no se hayan incorporado a la memoria y ni siquiera se establezca la
cuantía por eliminar el criterio de renta en la tarjeta de la tercera edad, extremo que sigue suscitando el rechazo de CCOO. También cuestiona que, a pesar de las
inversiones de Lipasam en modernización de flota e instalaciones para la gestión de los residuos, las
inversiones reales han disminuido “en casi un 10% con respecto al año anterior”.
Además, el Consejo entiende que hubiera sido
preferible “pequeños ajustes anuales (que podrían justificarse con el IPC)” antes que establecer la “importante subida propuesta”, algo que creen “no obedecen a una falta de previsión por parte de la compañía, sino más bien a otros criterios de oportunidad que no guardan relación con la gestión de la
Empresa”.
PP pide altura de miras y PSOE habla de presupuestos "sin ideología"
Tras el dictamen, el
delegado de Hacienda, Juan Bueno, ha preferido resaltar que comparten con el CESS "la necesidad de que Sevilla
cuente con un presupuesto aprobado para el año 2024, para que no se pierdan nuevas inversiones y
no se pongan en peligro los fondos europeos", lo que ha reclamado "que la
oposición esté a la altura, para alcanzar acuerdos que faciliten la aprobación del Presupuesto para 2024", apuntando que las inversiones en barrios preferentes se incrementan un 7 millones de euros.
Por su parte, la
portavoz adjunta del PSOE, Sonia Gaya, ha señalado que la deficiente inversión en zonas de transformación social demuestra que “
no hay una apuesta por transformar los barrios con más necesidades, habiendo sido una de las puntas de lanzas del señor Sanz en su
campaña electoral”, mientras que ha criticado que dijera que eran unos
“presupuestos sin ideología, pero yo creo que es muy osado llamar ideología a la
violencia de género o al cumplimiento de la
Ley de Memoria Democrática”, para los que hay escasas o nulas partidas.