El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha visitado las instalaciones de la Fundación Antonio Guerrero, en el Polígono Sur, donde se iniciará en los próximos días un servicio de atención integral a menores con diversidad funcional o trastornos en su desarrollo evolutivo y a sus familias.

El primer edil ha conocido de primera mano los diferentes espacios donde se desarrollan los tratamientos y también las distintas aplicaciones tecnológicas que se emplean para tratar los aspectos cognitivos, motor y de lenguaje de los menores con discapacidad, según informa el Consistorio en una nota de prensa.

De este modo, Sanz ha explicado que el Ayuntamiento de Sevilla "es el primero de España que presta este tipo de servicios y hemos querido empezar por uno de los barrios que más lo necesitan". Es este sentido, el alcalde ha indicado que "una de las prioridades de este Gobierno municipal es conseguir que barrios como este dejen de aparecer en esas estadísticas que hablan de los barrios más pobres de Europa y consigamos mejorar la calidad de vida de todos los sevillanos que viven en esta zona".

En esta línea, Sanz ha señalado que "con esta medida también pretendemos mejorar la calidad de vida de las familias que no pueden acceder a los cuidados que necesitan sus hijos y estoy convencido de que este servicio integral va a ser todo un éxito y que vamos a seguir ampliandolo a muchas zonas de la ciudad".

Un equipo multidisciplinar atenderá a niños con edades comprendidas entre los cero y los 16 años cuyas familias, estén siendo objeto de intervención en los servicios sociales comunitarios o en los equipos de tratamiento familiar el servicio de atención integral a menores con diversidad funcional o trastornos en su desarrollo evolutivo y a sus familias en el Polígono Sur.

Así, distintos profesionales en Psicología, Logopedia, Fisioterapia y Trabajo Social se centrarán en prevenir la cronificación de los trastornos del desarrollo y facilitar la adquisición de habilidades. También se trabajará en mejorar las capacidades físicas y cognitivas, potenciar la autoestima y conseguir el máximo grado de autonomía personal. A la semana, la capacidad de atención será de 30 menores y sus respectivas familias.

Los menores con diversidad funcional o con trastorno en su desarrollo evolutivo serán atendidos en horario extraescolar y las intervenciones serán personalizadas e integrales durante una o varias sesiones semanales, quincenales, mensuales o trimestrales según las características y valoración que hagan los profesionales