El gobierno local de Sevilla, que dirige José Luis Sanz, proyecta realizar
dos importantes modificaciones del vigente Plan General de Ordenación Urbana (
PGOU) para
recalificar suelos industriales y terciarios en
San Jerónimo y la Carretera de Carmona, respectivamente, y poder así construir
dos nuevas barriadas, de 729 y 400 viviendas.
A la actual corporación municipal le parecen pocas las
73.543 viviendas previstas en los suelos calificados como residenciales en el PGOU que se aprobó en el año 2006 y proyecta modificarlo para incrementar su número, según expuso el
gerente de Urbanismo, Fernando Vázquez Marín, en las Jornadas que sobre ‘Las modificaciones legislativas en el sector inmobiliario’ organizó la patronal sevillana de la construcción (Gaesco) el pasado 23 de abril.
En el balance sobre la
disponibilidad de suelo edificable en los barrios de la ciudad que presentó el
arquitecto Eduardo Martínez Zúñiga quedó patente que el suelo existente con planeamiento ya definitivamente aprobado
permite la construcción de 48.675 viviendas, lo cual no significa que todo ese número esté realmente construido, ya que hay bolsas de suelo donde no hay iniciada ninguna y otras, con proyecto de urbanización aún pendiente, y que todavía hay
sin tramitar suelo residencial que permitiría erigir
19.810 viviendas más.
En vez de apostar por
acelerar el desarrollo urbanístico del suelo residencial aún pendiente (donde se podría construir el 26,94% de las viviendas previstas en el Plan General), la Gerencia de Urbanismo proyecta
recalificar todo el suelo industrial de Cross-San Jerónimo para erigir allí un
nuevo barrio con 729 viviendas, en una operación que recuerda a la intentada por la Autoridad Portuaria en la franja colindante con la
avenida de Las Razas, calificada en este caso para Servicios Avanzados.
La bolsa de suelo industrial de Cross-San Jerónimo tiene una superficie de
473.180 m2 y el Plan General permite una
edificabilidad de 210.936 m2 para la instalación de
industrias, que tanto se anhelan en la ciudad para no depender en exceso del turismo y del sector Servicios, hasta el punto de que los agentes sociales constituyeron la
plataforma ‘Sevilla es industria’ para abogar en pro del fomento industrial.
‘Sevilla es Industria’ es una
alianza de las principales compañías del sector en la metrópolis y el conjunto de la provincia, para trasladar a la opinión pública la importancia de la producción industrial para la economía de un territorio. La plataforma quiere destacar que esta provincia es un
espacio idóneo para consolidación de proyectos industriales.
Acesur, Alestis Aerospace, Cobre Las Cruces, Coca Cola European Partners, Heineken, Persán, Renault y Siderúrgica Sevillana son los miembros actuales de esta iniciativa abierta a la incorporación de otras empresas que compartan sus objetivos. Su objetivo es
reivindicar la relevancia de las industrias sevillanas, fomentar el auge de esta actividad e impulsar el aprecio social por el sector.
Los
socios son un claro exponente de la
diversidad, calidad e internacionalización de la industria de Sevilla. Representan
sectores totalmente diferentes; agroindustria, automoción, industria química, minería metalúrgica y siderurgia. Elaboran productos muy reconocidos: aceros, cerveza, cajas de cambio, cobre, detergentes y productos de limpieza. Cuatro tienen propietarios internacionales, con la matriz en Países Bajos, Francia, Canadá e Italia, mientras que la quinta, de propiedad netamente local, ha demostrado que desde Sevilla se puede alcanzar el l
iderazgo más allá de nuestras fronteras.
Pero
para que se instalen industrias en Sevilla tiene que haber
suelo industrial. Actualmente aún queda por tramitar el planeamiento de un total de
879.132 m2 industriales en la ciudad, de los que
más de la mitad (54%) están en Cross-San Jerónimo. Si esos 473.180 m2 se transforman en residenciales,
ya sólo quedarían con esta calificación 405.952 m2.
Esta operación en ciernes es otra demostración de la
falta de modelo de ciudad de las sucesivas corporaciones locales, que se mueven a golpe de recalificaciones y de modificaciones del Plan General, con una apuesta casi exclusiva por el
ladrillo en forma de viviendas y usos terciarios. Habrá que esperar la reacción de la plataforma ‘Sevilla es industria’, si es que no vuelve a guardar silencio, como en las ocasiones anteriores.
También en suelo terciario
La otra
recalificación de suelo proyectada por el gobierno de Sanz, previa modificación del Plan General, es la del terreno calificado como
terciario en Carretera de Carmona-Kansas City, dentro del
distrito San Pablo-Santa Justa.
Se trata de una zona con
38.051 m2 de superficie y que tiene autorizada en el PGOU una
edificabilidad de 41.799 m2. Aquí la idea de la Gerencia de Urbanismo es que se cree un
nuevo barrio con 400 viviendas.
A ello hay que añadir la idea de realizar un
Estudio de Ordenación en el número 2 de la calle Afrodita, dentro del distrito
Bellavista-La Palmera para
cambiar el uso terciario de la parcela allí existente
a residencial, con el fin de construir
200 viviendas a continuación de la urbanización Jardines de Hércules y prolongar de facto la misma hasta los límites del polígono industrial Pineda.
Estas tres actuaciones permitirían
engrosar el parque de viviendas de la ciudad en 1.329 más, pero es improbable que ya en puertas del ecuador del mandato de esta corporación local se puedan aprobar las
modificaciones del Plan General en los dos años que quedan al gobierno de Sanz.