El alcalde de Sevilla,
José Luis Sanz, anunció este lunes el inicio de las obras de rehabilitación del
Palacio del Pumarejo, un proyecto esperado durante más de
14 años. La intervención, valorada en casi
8 millones de euros, tiene como objetivo devolver a este edificio histórico, declarado
Bien de Interés Cultural en 2003, su esplendor original, garantizando tanto su conservación como la mejora de la calidad de vida de los vecinos de la zona.
“Por fin iniciamos la
rehabilitación de este edificio,
propiedad del ayuntamiento desde hace 14 años, dando solución a una de las demandas históricas de la ciudad de Sevilla que no había sido atendida por parte de gobiernos anteriores”, declaró el alcalde Sanz, visiblemente entusiasta por ver comenzar un proyecto que había quedado
relegado en el pasado.
La obra, que se ejecutará en
dos fases, comenzó con la restauración de la mitad trasera del Palacio, que incluye más de
2.300 metros cuadrados de superficie. Además, el proyecto contempla la rehabilitación del
patio trasero y otros pequeños espacios del inmueble, con una inversión inicial de
4,7 millones de euros. La fase final, que abarcará la parte delantera del edificio y las fachadas, completará la restauración total con una inversión total de
7,9 millones de euros.
Las obras, que estima concluir en
18 meses la primera fase y en
12 meses la segunda, incluyen una
intervención arqueológica que podría alterar ligeramente los plazos, dependiendo de los hallazgos en el proceso de restauración, aunque se prevé que la rehabilitación esté finalizada para el
2027.
Transformación para el barrio y la ciudad
La rehabilitación no solo afectará al edificio, sino que también tendrá un
impacto positivo sobre el barrio de San Gil. Según Sanz, este proyecto revitalizará un entorno urbano clave para el
casco histórico de Sevilla, incrementando su valor inmobiliario y fomentando la cohesión social. “Nuestro objetivo es que los vecinos tengan un especio con las condiciones adecuadas para mantener sus costumbres, además de impulsar el
comercio y la
hostelería tradicional”, añadió el alcalde.
El Palacio del Pumarejo, un
referente para la comunidad local, se convertirá en un
centro multifuncional que albergará tanto viviendas como espacios para asociaciones y comercios. Además, la restauración de su arquitectura, que incluye el patio principal, las fachadas y las escaleras originales, garantizará la preservación de sus elementos históricos mientras se mejora su habitabilidad. También se instalarán
nuevas infraestructuras, como
ascensores y sistemas de climatización, para asegurar un entorno accesible y confortable.
Compromiso con el patrimonio y el futuro de Sevilla
La rehabilitación del Palacio del Pumarejo responde al compromiso del gobierno municipal con la conservación del
patrimonio histórico y el bienestar de los ciudadanos. La inversión, que también incluye mejoras en las infraestructuras y la accesibilidad del edificio, generará
empleo y dinamizará la
economía local. “Además de recuperar este bien cultural, esta obra beneficiará a toda la ciudad al mejorar su imagen y ofrecer nuevos espacios atractivos para el turismo”, concluyó José Luis Sanz.