La Guardia Civil de Sevilla ha detenido en la comarca de la Campiña a los padres de tres menores acusados de malos tratos a sus hijos de entre cinco y diez años de edad, que han quedado bajo custodia de un familiar después de que la autoridad judicial haya dictado medidas de alejamiento para los progenitores, que no podrán estar a más de 300 metros de los menores.
Según informa la Benemérita en un comunicado, la investigación se inició tras ser informada por los servicios sociales de que un niño de siete años había sido atendido en un centro de salud por heridas en la cabeza que asegura que han sido causadas porque sus padres "le han pegado con un palo".
Los servicios sociales también trasladaron a los agentes sus "sospechas" de que tanto este menor como sus hermanos podrían ser víctimas de maltrato por parte de sus progenitores, por lo que estaban alerta y les hacían seguimiento desde hacía cierto tiempo.
Tras estas advertencias, la Guardia Civil solicita los informes del seguimiento y los partes médicos emitidos en el centro de salud donde fueron atendidos los menores y se entrevista con los posibles testigos y sus profesores para recabar todo tipo de indicios y pruebas.
Una vez confirmadas las sospechas, se procedió a la detención de J.J.F.R. y M.C.F.R., padre y madre de los menores, como presuntos autores de un delito de malos tratos en el ámbito familiar. La autoridad judicial ha dictado las correspondientes medidas de alejamiento y los niños han quedado bajo la custodia de un familiar.
