El domingo por la mañana no empezó bien para el cura de Puente Mayorga, en San Roque. Su coche, aparcado junto a su lugar de residencia, amaneció con la luna rota totalmente destrozada.
Vecinos de la zona mostraron su solidaridad con el párroco permitiendo que el vehículo, en tal estado, quedara bajo techo en un garaje privado de uno de los residentes de la zona, mientras que el religioso denunciaba los daños y se disponía a proceder a los trámites para arreglar el desaguisado.
Además, subrayaron que "quieren pensar" que haya sido un "acto vandálico" que recayó en su turismo y no "un acto de represalia" contra el representante de Cáritas.
La Plataforma Puente Mayorga Ha Dicho Basta mostró su "total rechazo" a lo sucedido en la madrugada del sábado al domingo y expusieron que "este tipo de hechos vienen a refrendar nuestras peticiones de seguridad", en referencia a la demanda de presencia policial las 24 horas del día.