Fue una vez finalizado el último Consejo de Ministros del pasado 12 de marzo cuando se anuncio un paquete de ayudas de 11.000 millones, de los cuales 7.000 millones llegarán en forma de ayudas directas a fondo perdido para autónomos y empresas. El sector de la música está incluido en el paquete de estas ayudas, un sector que lleva soportando un durísimo nivel de restricciones desde el pasado mes de marzo de 2020, cuando se hizo realidad que la pandemia venia para quedarse y cuando empezamos a sufrir las restricciones en movilidad y horarios, además del duro confinamiento en toda España.

Lo que no está claro es si esta iniciativa será suficiente para reflotar un sector, especialmente castigado por la pandemia, que se ahoga por la falta de actividad.

Las ayudas directas a fondo perdido Línea Covid podrán ser solicitadas por festivales y promotores de música en vivo, salas de conciertos, tablaos flamencos, compañías productoras y otras empresas y autónomos vinculadas con el sector. Estas ayudas llegan, aunque bastante tarde, para cubrir, de manera directa y a fondo perdido, gastos fijos durante el período de pandemia y reducir el endeudamiento con bancos y proveedores al que tantos empresarios, artistas y trabajadores han tenido que recurrir para lograr la supervivencia.

Ayudas extraordinarias por la pandemia, con carácter finalista, para autónomos y empresas cuyo volumen de facturación anual se haya reducido en más del 30% en el año 2020 respecto al año 2019.

Las ayudas a percibir serán del 40 % de la caída del volumen de operaciones en el año 2020 respecto del año 2019, para empresas de hasta 10 empleados.

Para las de más de 10 empleados: las ayudas serán del 20 % del importe de la caída del volumen de operaciones en el año 2020 respecto del año 2019.

Para acceder a estas ayudas los autónomos y empresas deben cumplir las siguientes condiciones:

Hallarse al corriente de pagos de las obligaciones tributarias y de la Seguridad Social.

No repartir dividendos ni aumentar los salarios de su equipo directivo durante un periodo de dos años.

Mantener la actividad hasta junio de 2022.

No estar en concurso ni haber cesado la actividad en el momento de la solicitud.

No tener su domicilio en un paraíso fiscal.

Acreditar una actividad que se clasifique en alguno de los códigos del CNAE previstos en el Anexo del Real Decreto-ley 5/2021, antes de su entrada en vigor (puedes consultar el listado de CNAEs al final de este artículo).

La gestión correrá a cargo de las Comunidades Autónomas y serán controladas, a nivel nacional, por el Ministerio Hacienda, que lidera la sevillana Montero. Se anuncia que el proceso arrancará en unos 40 días y se establece un plazo de 30 días para la firma del convenio con el Estado, y 10 días para que las CCAA reciban las transferencias de los fondos.