El juez de guardia ha decretado prisión para nueve de los 13 detenidos en Reus y Mont-roig del Camp (Tarragona) el pasado 22 de marzo como presuntos miembros de una organización criminal de narcotraficantes.
Según informan este martes los Mossos d'Esquadra, se trata de un grupo criminal especializado, organizado y de alta peligrosidad, por lo que se contó con unidades de élite de este cuerpo y también del de la Policía Nacional para su detención.
La operación ha permitido decomisar 2,6 kilos de cocaína, 500 gramos de hachís, pequeñas dosis de heroína, 52 pastillas de éxtasis, 1,1 kilos de sustancia de corte, 210 plantas de marihuana y 2 kilos de cogollos.
Se da el caso que a la madre de uno de los detenidos se la identificó en la vía pública con una bolsa en la que llevaba un kilo de cocaína y 4.000 euros en efectivo.
También se intervinieron 81.700 euros en efectivo; dos armas de fuego, tres dispositivos eléctricos de defensa (taser), un puño americano; cinco básculas de precisión y un vehículo de alta gama.
A todos los detenidos les constan antecedentes por delitos relacionados contra la salud pública y los cuatro que el juez dejó en libertad afrontan este cargo.
La operación fue conjunta al haber recibido la Policía Nacional una denuncia anónima en el portal web para ello y coincidir en objetivos con la Unidad Investigación de la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Reus, que ya trabajaba en el caso.
La denuncia web informaba de que alguien traficaba a pequeña o media escala con cocaína en Reus y Miami Platja (Mont-roig del Camp, Tarragona).
La investigación culminó en la operación llamada CAVE-SEGAB, que realizó once entradas y registros simultáneos en domicilios, almacenes y una masía en los municipios de Reus, Miami Platja y la Pobla de Mafumet (Tarragona).
Los domicilios eran a su vez puntos de venta de droga y almacén, conocidos en el argot policial como guardería.
En los registros de los vehículos, en los que intervinieron perros adiestrados, se detectaron escondrijos para transportar las sustancias estupefacientes.
Posteriormente, se hizo un duodécimo registro en El Morell (Tarragona), en el domicilio de la madre que llevaba un kilo de cocaína por la calle, y allí hallaron 33.600 euros escondidos en el interior del cajón de una persiana.