Mossos d'Esquadra, Guardia Civil y Policía Nacional han desmantelado en una operación conjunta a una organización criminal que sustraía y falsificaba cheques y pagarés bancarios, que estuvo activa desde 2009 y pudo haber defraudado cerca de 2,5 millones de euros.
Según han informado los cuerpos policiales este miércoles en un comunicado, detuvieron en noviembre a ocho hombres, uno de nacionalidad boliviana y el resto españoles, de entre 30 y 50 años, y a una mujer de 50 años española, como presuntos responsables, por los presuntos delitos de estafa, falsificación de documentos, descubrimiento y revelación de secretos y pertenencia a organización criminal.
La investigación comenzó en junio bajo la supervisión del Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona y determinó que falseaban el nombre del beneficiario de los cheques raspando la tinta del escrito y rescribiendo el de algún miembro de la organizando, aunque respetando los importes y emisores.
La red contaba con un hombre y una mujer en el primer escalafón --que eran pareja sentimental-- encargados de manipular los cheques, que previamente había sustraído un transportista que abría la correspondencia durante su jornada laboral.
Otros miembros del grupo buscaban a personas con problemas económicos para utilizarlas como beneficiarios de los cheques a cambio de pequeñas comisiones que oscilaban entre el 5% y el 10% del importe, y el resto se lo repartía la banda.
Tras declarar en sede judicial, cinco de los detenidos han ingresado en prisión, y en el transcurso de la investigación se han detenido a 23 personas relacionadas con estos hechos, que han afectado a buena parte de las entidades bancarias que operan en España.