Los Mossos d'Esquadra han desarticulado un grupo de cuatro personas, tres hombres y una mujer entre 34 y 38 años, que se dedicaban a hacerse pasar por falsos técnicos en revisiones de gas para estafar y robar a personas de edad avanzada, ha informado la policía catalana en un comunicado este domingo.

La detención del grupo se produjo el jueves 22 y están acusados de ser los presuntos autores de varios delitos de robo, estafa, delitos leves de hurto, falsificación de documento mercantil y un delito de pertenencia a grupo criminal.

La investigación comenzó en octubre, cuando los Mossos centraron las indagaciones sobre grupos que se hacían pasar por falsos técnicos para robar a ancianos en un grupo muy activo que actuaba en la ciudad de Barcelona.

Este grupo actuaba siempre de la misma manera: la mujer hacía de operadora telefónica y llamaba para concertar una cita simulando que trabajaba para alguna empresa de subministro con el pretexto de hacer una revisión de mantenimiento periódica, y las víctimas eran personas de edad avanzada que vivían solas y, en algunas ocasiones, tenían enfermedades como Alzheimer o Parkinson.

El día de la visita se desplazaban al domicilio de la víctima dos o tres miembros del grupo, de los cuales uno hacía funciones de conductor y esperaba en el coche esperando a que se consumara el delito, e iban vestidos con ropa de trabajo con logos y emblemas propios de las empresas de subministro para no despertar sospechas.

En algunas ocasiones actuaban dos personas en el piso, de manera que uno distraía a la víctima y simulaba hacer la revisión mientras la otra recorría el piso para encontrar dinero u objetos de valor, y en otras ocasiones solo actuaba uno de los ladrones, que utilizaba la misma metodología y, si la víctima dudaba de la autenticidad de la revisión o se resistía, la intimidaban para conseguir su objetivo.

21 HECHOS DELICTIVOS

La investigación ha acreditado que el grupo había consumado 21 hechos delictivos, entre ellos dos robos con intimidación; cuatro hurtos agravados; dos estafas agravadas; seis estafas leves; cuatro falsificaciones de documento mercantil; un delito de pertenencia a grupo criminal, y un delito leve de hurto.

Los Mossos llevaron a cabo el dispositivo policial el jueves 22 con dos entradas en domicilios de Barcelona y Badalona (Barcelona), en los que detuvieron al grupo y localizaron 240 euros en efectivo; joyas; teléfonos móviles; cámaras fotográficas procedentes de los delitos; tarjetas de prepago; documentación diversa con datos de las víctimas; un ordenador portátil; una arma de fuego, y ropa con logos de empresas subministradoras del gas y maletines con kits de falso operario.

Los detenidos han pasado a disposición judicial este domingo y el juez ha decretado libertad con cargos para todos ellos, excepto para el jefe del grupo, que ha ingresado en prisión.