Agentes de la Guardia Civil, en el marco de la operación 'Bleugant', han desarticulado en Valencia una red que al parecer ha estafado a una empresa más de 2.700.000 euros en la venta de material sanitario de protección. Hay cuatro personas detenidas y otra más investigada, por los presuntos delitos de estafa, falsedad documental y de pertenencia a organización criminal.
Al parecer, los ahora detenidos cobraron más de 2.700.000 euros a una empresa ubicada en el territorio nacional por la venta de 330.000 cajas de guantes de nitrilo, que iban destinados a la protección de personal sanitario de Francia en la lucha contra el coronavirus, según han explicado las fuerzas de seguridad en un comunicado.
Según las investigaciones, los arrestados se ganaban la confianza de los potenciales compradores enviando vídeos donde se podía observar más de 260 palets cargados con lo que simulaba ser cajas de guantes de nitrilo. Además, acompañaban a los posibles compradores en visitas realizadas en una nave industrial ubicada en la provincia de Valencia, donde se almacenaba dicha mercancía, y cuyas cajas supuestamente contenían los guantes objeto de la venta.
Los miembros de la red exhibían a sus víctimas el contenido de los palets, cuya carga si correspondía con guantes de nitrilo de una conocida marca comercial. Pero lo que desconocían los compradores era que el resto de la mercancía eran cajas llenas de arena que previamente habían introducido y precintado, y que los estafadores hacían pasar por la mercancía que los perjudicados pretendían adquirir.
Una empresa de distribución, ubicada en territorio nacional, adquirió la mercancía abonando más de 2.700.000 euros a una cuenta bancaria turca controlada, al parecer, por el grupo delictivo. Posteriormente, sin conocer que había sido estafada, la empresa procedió a revender la mercancía a una segunda mercantil con sede en Francia para distribuirla por este país y dotar de material de protección al personal sanitario.
El engaño se destapó durante el traslado de la mercancía a Francia, cuando las víctimas, tras inspeccionar la carga, descubrieron que en realidad la mercancía que habían adquirido eran cajas repletas de bolsas de arena.
Durante los registros realizados se han intervenido 330.000 cajas de cartón que simulaban ser cajas de guantes de nitrilo, así como diferente documentación y equipos y accesorios informáticos y de telecomunicaciones.
Las diligencias han pasado a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 7de Alzira. La operación ha sido desarrollada por agentes pertenecientes a los Equipos de Policía Judicial de Sueca y Cullera (Valencia), que han contado con la colaboración de las autoridades policiales francesas y turcas.