Camas en los pasillos, esperas de casi 24 horas en Urgencias para subir a planta y colas en las cirugías. La sanidad valenciana continúa colapsada y la situación se recrudece.
El sindicato CSIF denuncia que la falta de espacio en el hospital de la Ribera de Alzira ha provocado que la dirección del centro haya instalado, durante unas horas, pacientes de Urgencias en un pasillo sin los medios adecuados. Con las camas en fila y sin cortinas que las separaran entre ellas, los pacientes tuvieron que esperar hasta que pudieron ser atendidos en planta.
CSIF también denunció que el Hospital de Manises ha llegado a un punto de saturación por exceso de ingresos que ha generado la alerta entre los sectores de la comunidad sanitaria. Reitera que en este centro no quedan camas libres y que están doblando habitaciones por lo que reclama más medios y personal además de exigir que se suspendan las operaciones no urgentes que requieran ingreso.
Sin embargo, estos no son los únicos hospitales de la Comunidad que se encuentra al límite. Los sanitarios denuncian que el hospital General de Castellón está agilizando las altas por la falta de camas. El hospital se encuentra al borde del colapso debido al repunte de patologías respiratorias como gripe, bronquiolitis y Covid.
Esto afecta de forma colateral al departamento de urgencias. El sindicato Intersindical Salud cifró en casi 24 horas el tiempo de espera de un paciente para obtener una cama.
Una situación que también sufre el personal sanitario que debe cuadrar todo para poder atender a los enfermos que llegan a Urgencias y que después hay que subir a planta. Esto, sin afectar a la actividad quirúrgica, sí que está haciendo que muchos pacientes reciban cama sólo después de su operación y no antes como venía ocurriendo.
Mientras se seguirá trabajando con el Plan de Contingencia que pasa por la agilización de las altas a pacientes que puedan irse a casa o ser hospitalizados de forma domiciliaria.
