Ramiro Blasco, exabogado del exgerente de Imelsa, Marcos Benavent, autodenominado 'yonki del dinero', ha presentado una queja en el Ilustre Colegio de Abogados de Valencia (ICAV) contra Emilio Pérez Mora, abogado del expresidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, por utilizar la palabra "tonto" para aludirle en el juicio que se sigue en la Audiencia Provincial por el caso Imelsa.
Así se desprende de la queja presentada por Ramiro Blasco, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la que expone que se ha infringido el Código Deontológico de la Abogacía Española. Blasco estuvo defendiendo a Benavent desde el origen del caso Imelsa hasta unos meses antes de celebrarse el primer juicio por una de las piezas del procedimiento, en el que su defensa pasó a llevarla el penalista Juan Carlos Navarro.
Con este cambio, el 'yonki del dinero' se desdijo de todo lo que había mantenido durante años respecto a sus denuncias de corrupción en órganos de la Diputación y aseguró que manipuló las grabaciones que originaron el procedimiento.
Ramiro Blasco expone en su escrito que el pasado 23 de enero, durante el juicio por los presuntos 'zombies' de Imelsa, Pérez Mora manifestó: "El más tonto de los abogados no habría permitido jamás que Marcos Benavent prestase declaración; con acogerse al derecho a no declarar no habría caso Taula, pero se le vende que es perfectamente legal".
Estas manifestaciones, indica en su texto, fueron recogidas por diversos medios de comunicación, y se adjuntan varios de los artículos a los que se hace referencia.
Tras recibir el escrito, desde el ICAV se ha iniciado un expediente de queja con el fin de conocer las circunstancias del caso concreto y la conveniencia o no de proceder a la apertura de expediente disciplinario. Además, se le ha dado traslado a Pérez Mora para que presente las alegaciones que estime oportunas.
Así, el letrado de Rus ha respondido con un escrito al ICAV, consultado por Europa Press, que se ha cometido un "error" de interpretación de sus palabras y que no ha existido "en ningún momento" intención de faltar el respeto a nadie.
En esta línea, ha aclarado que la frase en cuestión tenía un preludio que se omite en las noticias aportadas y es que el letrado manifestó a la Sala, en cuestión previa de nulidad, que se ocultó por parte de la Fiscalía a las defensas que el ordenador entregado por Mariano López, exsuegro de Benavent, del que supuestamente se habían extraído todos los documentos y grabaciones de conversaciones que dan origen al llamado caso Taula, estaba vacío, no tenía archivos.
Y que si ello hubiera sido conocido, esto es, si las defensas hubieran tenido noticia de que no existía fuente de origen, "ni el más tonto de los abogados", "en genérico", hubiera permitido que Marcos Benavent declarara.
La frase, por tanto, --aclara el letrado-- "parte de un condicional que desconoce mi compañero. No se está diciendo que alguien sea un tonto por faltarle al respeto, se está estableciendo un discurso lógico en orden a una u otra actuación, en caso de haberse tenido una información de la que ahora disponemos y de la que entonces no disponíamos", añade.
Además, señala que la referencia a que el primer abogado del 'yonki del dinero' pilotó la estrategia de colaboración con Anticorrupción es un hecho manifestado por Benavent, es él que hizo tales afirmaciones y el abogado --indica-- las recoge como parte de la estrategia de defensa de su cliente, "estrategia que trata de desvirtuar las primeras declaraciones del antedicho señor, señalando que obedecen a un pacto con la Fiscalía y no a la verdad", apostilla.
Por ello, señala que "pretender que se sancione gravemente a un abogado que actúa ante la Audiencia, en celebración de vista oral, defendiendo a un acusado, ejerciendo el derecho de defensa con todos los medios legales a su alcance y utilizando una dialéctica en estrictos términos de defensa, es ni más ni menos que un ataque al ejercicio e la abogacía, un ataque al derecho de defensa y un intento de intimidación en plena celebración de juicio que no se puede tolerar".