El hombre que es juzgado en la Audiencia de Sevilla acusado de asesinar a su pareja en abril de 2022 y de tirar su cadáver al río Guadalquivir, ha asegurado este lunes ante el jurado que nunca pensó en matar a su novia, a la que quería y con la que tenía planes de futuro, y se ha mostrado "muy arrepentido".
Este procesado, que se enfrenta a una petición de las acusaciones de 29 años de cárcel y quien ha respondido únicamente a las preguntas de su defensa, ha enmarcado lo ocurrido en la supuesta "traición" que sintió al darse cuenta de que ella había estado con otro hombre, tras descubrir unos "chupetones" un día que estuvieron bebiendo.
"Nunca se me pasó eso (matarla) por la cabeza. Es una desgracia", ha sentenciado el acusado, quien se ha mostrado "muy arrepentido" por lo ocurrido y ha pedido perdón a la familia de origen boliviano de la fallecida.
Del día de los hechos recuerda que habían estado bebiendo gran cantidad de cervezas y que en un momento que ella se fue a la habitación para cambiarse estuvieron discutiendo al ver él que tenía "chupetones" en el cuello y se pusiera "furioso".
Frialdad y premeditación
La versión del acusado contrasta con la mantenida el pasado viernes por el Ministerio Público durante la primera sesión de la vista, cuando la fiscal en sus alegaciones iniciales subrayó la "frialdad" y la "premeditación" con la que actuó, a su juicio, el presunto asesino.
La fiscal recordó que fue capaz de "seguir de fiesta y viviendo la vida" durante dos meses hasta que hallaron el cadáver de la víctima, mientras que la acusación particular -ejercida en nombre del hijo de la fallecida- censuró igualmente la actitud del procesado: "Asesinó a una mujer por el hecho de serlo, porque era mujer y se iba a ir con otro", sentenció.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular y la popular ejercida por la Junta de Andalucía consideran los hechos constitutivos de un delito de asesinato con las agravantes de parentesco y de género, y atribuyen además al acusado un delito continuado de estafa y de lesiones en el ámbito de la violencia sobre la mujer con la agravante de reincidencia.
Frente al relato de las tres acusaciones personadas, la defensa mantiene que el procesado debería ser absuelto, dado que el día de los hechos estuvo movido por un arrebato o un estado pasional ante los celos que le generó enterarse de que su pareja había estado con otra persona, circunstancia que considera una eximente. De manera subsidiaria, alega la atenuante por consumo de alcohol.