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Sevilla

La Junta destinará 4,2 millones a rehabilitar viviendas en medio centenar de municipios de Sevilla

Las actuaciones de rehabilitación acogidas a este paquete de ayudas se desarrollarán a través del Programa de Rehabilitación Autonómica

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La Consejería de Fomento y Vivienda invertirá en la provincia de Sevilla 4,23 millones de euros para rehabilitar el parque residencial existente en medio centenar de municipios, lo que permitirá mejorar las condiciones de vida de un total de 450 familias con recursos limitados.

   Según ha informado la Consejería en una nota, esta partida económica, que se aplicará durante 2013 y 2014 mediante el programa de Rehabilitación Autonómica, se suma a la línea de ayudas de 2,55 millones de euros destinadas a Sevilla por el Plan de Choque por el Empleo en materia de rehabilitación aprobado por el Consejo de Gobierno en 2012.

   La delegada territorial de Fomento y Vivienda en Sevilla, Granada Santos, ha destacado que "en un contexto de recortes, la Junta de Andalucía está sabiendo utilizar la inversión pública como motor para la creación de empleo en un ámbito como el de la rehabilitación, prioritario para la Junta de Andalucía".

   "Con este tipo de iniciativas no sólo se mejora las condiciones de vida de las familias gracias a la reforma de sus viviendas sino que, sobre todo, se fomenta la actividad empresarial y el empleo directo e inducido en los municipios sevillanos, muy castigados por los índices de paro", ha señalado.

   Para esta nueva partida, la Junta de Andalucía ha utilizado los mismos criterios elegidos para el Plan de Choque, de forma que se ha tenido en cuenta indicadores objetivos como el Paro Registrado, el TEAS (Trabajadores Eventuales Agrícolas Subsidiados), la población y la incidencia del programa de Rehabilitación Autonómica en los últimos años.

   Las actuaciones de rehabilitación acogidas a este paquete de ayudas se desarrollarán a través del Programa de Rehabilitación Autonómica, una de las principales líneas de adecuación y mejora residencial contemplados en los planes autonómicos de vivienda.

   Este programa concede una subvención pública equivalente al 50 por ciento del presupuesto de ejecución de las obras para mejorar el interior de las viviendas. El presupuesto de los trabajos tendrá unos límites por vivienda que oscilan entre los 12.000 y los 18.000 euros, en función de si las obras afectan o no al sistema estructural de la edificación. El restante 50 por ciento será asumido por los residentes en las viviendas.

   Las obras a ejecutar consisten en reparaciones de las estructuras para garantizar la seguridad constructiva de las casas y la modernización de las instalaciones de abastecimiento de agua, saneamiento y electricidad. También plantea la redistribución interior de los espacios para lograr mayor funcionalidad y aumentar las dimensiones de las estancias, así como mejoras para conseguir más luz natural y ventilación.

   Las familias que se acogen a esta medida cuentan con unos ingresos inferiores a 2,5 veces el Iprem (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), lo que equivale a 1.331 euros al mes. Por ello, la Consejería de Fomento y Vivienda asume los honorarios para la redacción de los proyectos y de la dirección de obras, un concepto incluido en las ayudas.

   Los destinatarios de las subvenciones recibirán de media entre 6.000 y 8.000 euros. Además de los incentivos concedidos por la Junta de Andalucía, que serán gestionados a través de los ayuntamientos.

Política de rehabilitación de la Junta

   Tanto esta nueva partida de 4,23 millones de euros como el Plan de Choque por el Empleo que se encuentra actualmente en desarrollo en 32 municipios de Sevilla se integran en la política de rehabilitación desarrollada por la Junta de Andalucía, que persigue la mejora y renovación del parque residencial existente mediante programas específicos de rehabilitación y líneas integrales de recuperación más ambiciosas en barrios y centros históricos.

   Con ambas acciones se pretende una revitalización desde lo urbano, a través de las mejoras residenciales y de las condiciones de habitabilidad, hacia un modelo de ciudad compacta y sostenible. Pero también desde lo social y lo económico, con el fin de garantizar a la población residente condiciones de vida dignas y la creación de microempleo en el sector de la construcción.

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