Miguel Vaquero es ya el nuevo comisario de Marbella. Las autoridades se han apresurado a darle la bienvenida. Ha sido también una oportunidad para repasar los índices policiales en la ciudad y la mejora de las infraestructuras de la Policía Nacional, como el refuerzo del servicio con una comisaría en San Pedro Alcántara, el Servicio de Atención del Turista Extranjero o la próxima apertura de una oficina de Extranjería en La Patera donde también se podrán tramitar el DNI y el pasaporte. Ahora, el nuevo comisario, se plantea retos importantes, particularmente, dijo, "intensificar la lucha contra la delincuencia, incrementar la calidad del servicio, reduciendo los tiempos de respuesta y potenciar el área de participación ciudadana".
Al comisario le han acompañado, entre otros, la alcaldesa, Ángeles Muñoz, y la delgada del Gobierno en Málaga, Carmen Crespo.
A Vaquero le avala, ante todo, su trayectoria profesional, sus años de servicio y los importantes cometidos que ha desempeñado hasta la fecha. En cualquier caso, el nombramiento de un comisario en esta ciudad siempre va acompañado de la controversia, por lo poco que duran en su cargo los designados.
En una ciudad turística, la seguridad es materia de máxima importancia, como le recuerdan a las autoridades policiales todos los estamentos de la sociedad local siempre que surge la ocasión.
La plantilla policial en la ciudad ha crecido en alrededor de 100 efectivos entre 2010 y 2014, de 280 a 380 agentes. Además se ha producido una bajada en un 6,7 por ciento de los delitos y faltas en el entorno de Málaga y la Costa del Sol en el año 2013, a falta de las estadísticas del último trimestre.
