El punto plenario salió adelante con los votos a favor de PSOE, PSA, Nadine Fernández (IU) y Estefanía Benítez (PA), y con la abstención de PP, José Pedro Butrón (IU), José Antonio Blanco (IU) y Manuel Guerrero (PA), que por segunda vez en un Pleno ha vuelto a emitir un voto diferente al de su compañera de partido.
“Trampa” del PP
Según explicó ayer la delegada municipal de Economía y Hacienda, Manuela Moreno, la iniciativa de abrir dos plazos para el pago del IBI fue anunciada en su momento por el Gobierno del PP como una medida positiva aunque “venía con trampa, porque lo que no dijeron los populares es que quien no quisiera acogerse a ella y decidiera obrar como el año anterior, esto es, pagando todo el recibo de una vez, tendría un recargo del 5 por ciento”.
Cabe recordar que, hasta que se ha aprobado este cambio, las ordenanzas recogían un primer plazo de pago que iba desde el 5 de mayo hasta el 20 de julio, y uno segundo que abarcaba del 15 de septiembre al 20 de noviembre. Los contribuyentes que abonaran su recibo en dos partes no tendrían recargo alguno, pero aquellos que lo quisieran pagar completo en el segundo periodo verían incrementado su recibo en un 5 por ciento. Ampliándose el primer plazo hasta el 20 de noviembre se esquiva ese recargo y aquellos contribuyentes que hayan decidido pagarlo completo en el segundo periodo lo podrán hacer sin ser penalizados.
Catastro
Por otro lado, a preguntas de los periodistas, Moreno apuntó que el equipo de Gobierno está en conversaciones con la Dirección General del Catastro, para intentar que se revise la ponencia de valores a la que el anterior alcalde, Ernesto Marín, dio el visto bueno. El denominado catastrazo ha supuesto un aumento importante en el IBI. “En su día se dejaron pasar todos los plazos para presentar alegaciones y, claro, ahora no es ni mucho menos una tarea sencilla. De todas maneras, vamos a seguir trabajando en este asunto”, apuntó la delegada.
El Ayuntamiento prevé recaudar con el IBI de este año 18,9 millones, para lo que se han emitido 50.819 recibos. En 2008 fueron 50.147, con un montante de 14,9 millones. De estos datos, y con un simple cálculo, se deduce que los chiclaneros pagaron en 2008 una media de 297,12 euros por este impuesto, mientras que este año la media ha ascendido a 371,90 euros. Esto supone un incremento del 25,12 por ciento en cada recibo, un porcentaje bastante cercano a lo que denunciaban las federaciones de vecinos que hablaban de un 30 por ciento de incremento por culpa del catastrazo.