Belmar comentó que este traslado se produce “de manera inesperada” y que siente “tristeza” de abandonar Algeciras tan pronto, pero que toma de buen grado el nuevo reto que se le presenta entre manos de igual modo que cogió su anterior destino.
El dirigente policial recibió la noticia de su traslado hace menos de una semana. Pese al poco tiempo que ha permanecido en la familia policial algecireña, manifestó haberse sentido “querido y arropado” por los funcionarios de la sede policial.
Prueba de este aprecio mutuo fue la despedida oficiada ayer por sorpresa en honor al jefe policial en la Comisaría local, hacia las 13.30 horas, y en la que participó un buen número de agentes de la plantilla local, según indicaron fuentes policiales.
Belmar afirmó, asimismo, que se va “con buen sabor de boca” y que no descarta volver a ejercer en Algeciras si más adelante se presenta la ocasión.
Sustituto
La figura del segundo comisario no desaparecerá de Algeciras con la marcha de Belmar. El propio comisario confirmó a este diario que su sustituto, que aún no tiene nombre y apellido, llegará “entre los meses de noviembre y enero”.
Daniel Belmar comenzó a ejercer en Algeciras el pasado mes de enero. Está casado, tiene dos hijos y es natural de Cuenca. Con una gran vocación formativa, tiene una dilatada experiencia como formador de agentes policiales, así como en la Policía Científica. Las funciones que ha llevado a cabo Belmar en los últimos nueve meses estaban dirigidas, según explicaba él mismo el pasado 26 de enero, a labores de coordinación operativa.