Así lo destaca el documento de conclusiones del encuentro, firmado por los ministros de Exteriores de Holanda, Maxime Verhagen, y de Afganistán, Rangin Spanta, y por el representante especial de la Secretaría General de las Naciones Unidas para Afganistán, Kai Eide.
El texto da la bienvenida a los planes anunciados por la Administración de Barack Obama y considera que son “una importante contribución para revitalizar los esfuerzo comunes en Afganistán”.
Según asegura, los participantes en la conferencia apoyaron su “énfasis por unir el apoyo civil y militar de forma coherente y dentro de una perspectiva regional”.
El documento de cuatro páginas destaca el consenso logrado entre los países participantes en la conferencia para dar un impulso a la estabilización de Afganistán y para coordinar mejor los esfuerzos en la zona.
Además, recoge cuatro grandes prioridades para el futuro de Afganistán: impulsar el buen gobierno en el país, acelerar el crecimiento económico y el desarrollo, reforzar la seguridad y expandir la cooperación regional.
En una rueda de prensa, Verhagen destacó la “unidad del mensaje” y el “compromiso” con Afganistán demostrado por la comunidad internacional en la cita de La Haya, en la que participaron dirigentes de todo el mundo.
“Hoy es un gran día para Afganistán”, aseguró Spanta, que recalcó que la conferencia ha sido “una gran demostración de solidaridad” con el país.
El dirigente afgano destacó además la presencia de Irán y de Paquistán en la reunión como fórmula para mejorar la estabilidad en toda la región, uno de los puntos en los que hacen hincapié las conclusiones de la conferencia.
En este sentido, Verhagen consideró que la participación de esos dos países demuestra su interés por tener un “papel constructivo” y se mostró “convencido” de que ayudará a la mejora de la cooperación regional.
Spanta reiteró además el apoyo de Kabul al proceso de reconciliación que ayer respaldó también la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, y aseguró que dentro de la lucha contra el terrorismo también se debe tratar de “ayudar” a todos aquellos que “estén dispuestos a aceptar la constitución y dejar las armas”.
