Desde el Ayuntamiento se explica que el permiso para su colocación caducó el día 31 del pasado mes de abril pero que, debido a que la retirada requiere de material técnico y la sucesión de días festivos dificulta su contratación, será finalmente retirada el próximo lunes.
Con todo, desde el Consistorio se indica que “se trata de una incidencia mínima provocada por un hecho circunstancial”.
Protestas
La polémica se destapó el pasado viernes cuando el portavoz del grupo municipal del Partido popular, José Ignacio Landaluce, solicitó el “estricto” cumplimiento del plazo otorgado por el Ayuntamiento para el mantenimiento de la bandera republicana.
Para Landaluce, “dado que el plazo finalizaba el día 31”, el popular exigió que “la bandera no amaneciera ayer en esa plaza”, cuestión que como se ha comprobado no se ha cumplido finalmente.
Según el líder popular, del izado de la bandera “no cabe otra lectura que este acto es una clara afrenta al ordenamiento constitucional. El beneplácito del equipo de Gobierno con el alcalde, Tomás Herrera, a la cabeza da muestras de apoyo a quienes defienden unos preceptos claramente antidemocráticos, porque lo que los españoles quisieron, y así lo hicieron constar en referéndum en 1978, fue la Monarquía Parlamentaria”.