Zapatero ha valorado las últimas declaraciones y mensajes de dirigentes de la izquierda abertzale, en la rueda de prensa que ha ofrecido en el Palacio de la Moncloa para informar de la remodelación del Gobierno, con la que Alfredo Pérez Rubalcaba asciende a la vicepresidencia primera manteniendo la cartera de Interior.
Zapatero no ha escatimado elogios para la labor realizada por Rubalcaba -"magnífico" ministro- y ha estimado que era conveniente mantenerlo en "un momento tan decisivo" para avanzar hacia el final de ETA.
Por responsabilidad, ha insistido, ha querido preservar esa "gran tarea" y mantenerlo al frente del departamento, porque en esta última fase se han logrado "grandes avances" en la lucha antiterrorista y en buena parte han estado protagonizados por el Ministerio de Interior y por la acción de la Policía y la Guardia Civil.
El final de la banda terrorista, ha reconocido, será "difícil y complicado", pero se trata de una "prioridad estructural" para el Gobierno.
En este contexto, preguntado por la aspiración de acabar con ETA en esta legislatura, ha señalado que se trabaja para que la banda desaparezca "cuanto antes" y ha considerado que se está en un momento en que ese trabajo ha dado "más resultados que nunca", aunque ha apostado por la prudencia tras recordar los cuarenta años de actividad de los terroristas.
Zapatero ha querido dejar claro también que en el pacto presupuestario y de legislatura suscrito con el PNV no existe ningún acuerdo secreto relacionado con el fin de la banda terrorista y ha calificado esos rumores de "absolutamente inciertos".
Desde que llegó a La Moncloa, ha apuntado, siempre ha habido un diálogo directo con el PNV sobre la lucha antiterrorista y el fin de ETA, porque sería "absolutamente impensable no tenerlo" con una fuerza de ese calado, como con el resto de formaciones políticas democráticas.