La
Plataforma de trabajadores del Área Sanitaria de Osuna ha solicitado a la
Inspección de Servicios Sanitarios de la Consejería de
Salud que realice una
valoración de la baja médica del que fuera
exjefe de Servicio y exdirector económico-financiero de esta área sanitaria,
Casto Ortiz Montaño, al entender que la causa por la que no está trabajando
no es una patología como tal sino un
“proceso natural de la vida” y reclama que se le dé el
alta “con la misma
celeridad que él solicitaba para sus empleados”.
Los trabajadores enviaron el pasado
29 de diciembre un escrito al
inspector de la zona de la Unidad de Valoración Médica de Incapacidades, dependiente de la Consejería de Salud en Osuna, solicitándole la
valoración de la baja de la que está disfrutando Casto Ortiz desde el mimso
momento en el que fue cesado como jefe de Servicio y tenía que
reintegrarse al puesto que le corresponde en el organigrama del SAS, que no es otro que el de
auxiliar administrativo.
Según el escrito, se dirigen al inspector de zona “para solicitar la
valoración del estado de baja laboral del exdirector de personal y exdirector económico-administrativo del Área de Gestión Sanitaria de Osuna, Casto Ortiz Montaño, quien ha presentado un
trastorno adaptativo tras su cese y vuelta a su puesto de auxiliar administrativo, por lo cual ha llegado a nuestros oídos que ha solicitado la baja laboral, esta plataforma de trabajadores entiende que
esa patología es un proceso natural de la vida y no una enfermedad”.
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Añade la plataforma que,
“siguiendo los principios que él mismo exigía a sus trabajadores y trabajadoras, le pedimos que se realice la
valoración y alta laboral en su caso, con la misma celeridad que él solicitaba para sus empleados”.
Según confirmaron miembros de la Junta de Personal del Área Sanitaria de Osuna -que nunca se reunieron para abordar el tema, según especifican- y también fuentes sindicales, corroborado además de la propia Gerencia,
su cese fue el pasado martes 19 de diciembre cuando a las 12.30 el
abogado del Distrito Sanitario se
personó en el despacho de Casto Ortiz para hacerle entrega de su
carta de cese como Jefe de Servicio del Área Sanitaria de Osuna, quien
“se negó a firmar”, solicitándole que entregara las
llaves del despacho y su abandono.
“Poco después se personaron
personal de seguridad y mantenimiento para proceder al
cambio de bombín de la cerradura y a la inmovilización y clausura de su ordenador”, relatan las fuentes, que destacan que “a menos de cincuenta días de su toma de posesión, la nueva gerente del A.G.S Osuna ha sido capaz de acabar con un “garbanzo negro” que amenazaba con su nueva gestión”.
Las fuentes de personal también aseguran que
el mismo día que fue cesado, consiguió darse de baja médica.
